Afortunadamente nuestro cuerpo está equipado con dos tipos de sistemas de defensa que son capaces de neutralizar estos radicales libres antes de que ocurra el daño tisular – uno está en nuestras células y el otro es lo que obtenemos a través de los alimentos o suplementos. Las enzimas antioxidantes SOD (superóxido dismutasa) la fabricamos en nuestras células. Esas enzimas antioxidantes beneficiosas estabilizan los radicales libres así que no pueden dañar tejidos del cuerpo.
Normalmente nuestra dieta incluye vitaminas, minerales y otros nutrientes antioxidantes, mejor conocidos como A,C,E y minerales como selenio, zinc y hierro. Otras vitaminas, como las B2, B3 y B6 así como algunas que no se consideran vitaminas como la Q10, ácido alfa lipoico y proantocianidina (extracto de granada), también son antioxidantes potentes.
El ADN de nuestras células sintetiza las proteínas que necesita. Entre ellas, las enzimas. Un tercio de todas las enzimas de nuestro cuerpo requieren un cofactor derivado de vitaminas, y algunas de minerales también.
Sin estos cofactores las enzimas son inútiles. Por lo tanto, las vitaminas y minerales tienen dos roles importantes: proveer protección antioxidante y mantener la salud. Sirven de antioxidantes para ellos mismos y son necesarios para construir enzimas antioxidantes para trabajar. Al tomar vitaminas y minerales, aseguraremos que nuestro cuerpo tendrá bloques constructores necesarios para crear el suministro adecuado de enzimas antioxidantes todo el tiempo.
Se pueden tomar esas enzimas antioxidantes como suplemento, pero suelen absorberse vagamente en el tracto digestivo, así es mejor tomar vitaminas y minerales y dejar que el cuerpo construya sus propias enzimas. Pero según las investigaciones en el campo de la genética se descubrió que muchas personas tienen defectos genéticos que causan que estos cofactores se unan inapropiadamente a las enzimas que los necesitan, un problema que puede ser corregido sólo con tomar cantidades más elevadas de estos nutrientes. Eso nos lleva a un descubrimiento importante y es que la mayoría de la gente necesita más cantidad de antioxidantes de las que se está recomendando oficialmente. A modo de conclusión, la salud óptima no es posible sin suplementación.